lunes, 21 de noviembre de 2011

No he radiado la otra llanta

Sorpresas te da la vida (y algún disgustillo).
Estaba yo tan contento con las mordazas de los frenos y ya me disponía a montar la otra rueda mientras sigo dándole vueltas a lo del centrado por si se me aparece la inspiración y encontrar métodos más científicos de los que suelo utilizar (hasta ahora hago el centrado con dos rotuladores...).

Peeeeeeeero, descubrí que el pulidor se portó mál y no pulió los canales de la parte exterior de los cubos, especialmente del que tengo para montar, el de la rueda trasera. Así que me he liado la manta a la cabeza y estoy intentando sacar brillo de donde no lo hay amén de alguna "mugre" perdida por ahí. Estoy probando diferentes fórmulas, desde el consabido cepillito, la tira de lija de grano fino, el estropajo de lana de acero, las pastas de pulir y por último, un cordel de esparto que va de cine. Lo único, es que me canso. Parece que haga fuego, como los trogloditas.

Tras no sé cuantos rato de fregar "paquí-pallá", lo dejé hasta el próximo día y con la casi absoluta convicción de desmontar la otra rueda, la que se ve en la foto del post anterior, para limpiar con profundidad los canales del cubo. ¡ y encima es la rueda delantera que se ve más!. La próxima vez me lo tendré que mirar mejor antes de montar y no cometer este tipo de fallos. "Cachislamar!".

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